El largo adiós – Raymond Chandler
Last Updated on: 7th enero 2019, 07:00 pm
El largo adiós es la penúltima novela de Raymond Chandler, publicada en 1958. En una carta seis años antes apunta:
Lamentablemente uno madura, se vuelve complicado e inseguro, uno se interesa en los dilemas morales más que en quién le rompió a quién la cabeza. (…) Escribí la obra como quería escribirla, (…) no me importó si el misterio era bastante obvio, pero me preocupé por la gente, por ese extraño mundo corrupto en el que vivimos, y cómo cualquier hombre que trata de ser honesto al final parece sentimental o directamente idiota. Basta de eso.
La novela es muy diferente al resto: basta decir que el caso involucra a Philip Marlowe de manera indirecta: no hay un “cliente” de por medio, sino un amigo, una tal Terry Lennox con el que ha tomado algunas copas un par de veces y que un día le pide que lo lleve a Tijuana.
Marlowe sospecha lo que ha pasado: al regresar de Tijuana se entera que han asesinado a la esposa de Lennox y su amigo es el principal sospechoso. Marlowe cree en todo momento en la inocencia de Lennox y la novela, más que la resolución del misterio, trata sobre la lealtad de un hombre a una idea —pese a su aparente dureza, un hombre honesto en un mundo corrupto no deja de ser patético.
Piglia, en su libro “El último lector”, opina que la novela es un largo poema a la desesperanza, al hombre que envejece: el golpe final es el futuro matrimonio de Marlowe con una millonaria:
La mujer ligada al mundo del dinero es la perdición absoluta y está en tensión con el hombre lúcido y decente.
Esta trama oculta tal vez no se entienda sin conocer dos detalles de la biografía de Chandler: su esposa tenía 20 años más que él y Chandler trabajó como guionista en Hollywood —el mundo de excesos y seducción le era cercano. Al final, cualquier hombre lo único que desea es no estar solo: cuando muere la esposa de Chandler, el escritor confiesa en una carta:
Durante treinta años fue la luz de mi vida, mi única ambición. Todo lo demás que hice fue para alimentar el fuego en el que ella pudiera calentarse las manos. Es todo lo que puedo decir.
Después de esto, Marlowe se casa en su última novela.
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